Periodista deportivo. Madrid. Aquí, reportajes y entrevistas desgranando la actualidad tenística.
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Novak Djokovic (Belgrado, 1987) ha regresado a Australia dos años después y lo ha hecho como si el tiempo no hubiera pasado: ganando. Ha sido en un torneo menor, en Adelaida, preparatorio para lo que viene en el Abierto de Australia. Pero le ha permitido conseguir su título número 92 (igualando a Nadal) y llegar a Melbourne como el gran favorito a ganar el título a finales de mes.
Djokovic co-protagonizó hace 12 meses (junto a Tennis Australia) uno de los episodios más tristes de la historia moderna del tenis acabando deportado y amenazado con no poder volver al país aussie durante varios años. Su negativa a vacunarse le impidió, además, disputar buena parte de la temporada, incluido el Abierto de EEUU.
En 2023, con el mundo normalizado (exceptuando ciertos países), Novak ha regresado a uno de los países con los que mejor relación tenística tiene, sino con el que más: 11 títulos de los 92 totales (12%). Incluyendo nueve Abiertos de Australia.
Desde que Djokovic perdiese en cuartos de final de Roland-Garros de 2022 ante Rafael Nadal, el serbio ha perdido dos partidos de 33 y jugado las finales de los seis torneos que ha jugado. Y uno de ellos en una exhibición.
Tras el Grand Slam parisino, Djokovic disputó Wimbledon. Remontó dos sets a Sinner en cuartos de final y un set a Norrie y a Kyrgios en semifinales y final, para alzar el título. Tras la hierba británica, Djokovic desapareció del mapa por la prohibición de entrar a EEUU o Canadá sin vacuna. Volvió en la Laver Cup donde ganó a Tiafoe y cedió ante Auger-Aliassime. La victoria del canadiense computa a efectos estadísticos por muy exhibición que sea la Laver Cup porque la ATP así lo considera.
Ya en octubre y de cara a preparar Bercy y las Finales (clasificado como campeón de Grand Slam), Djokovic viajó a Israel y Kazajistán para disputar un 250 (Tel Aviv) y un 500 (Nur-Sultán). Torneos menores, sí, pero con nombres como Cilic, Garin, Khachanov, Medvedev o Tsitsipas. Cedió un set. Y sumo sus títulos 89º y 90º.
Bercy y Turín (sede de las finales) fueron sus últimas dos paradas del año. Y en París llegó la que es, por ahora, su única derrota en torneo oficial con puntos desde junio de 2022. Fue en la final, ante el danés Rune. Fue tras ganar 6-3 el primer set. Cedió 3-6 y 5-7 los dos siguientes para sorpresa de todos. Se desquitó dos semanas después en Turín ganando las Finales por quinta vez y haciéndolo con pleno: 5-0. 91º título y 26-2 de balance en cinco meses.
El comienzo de 2023 ha devuelto a Djokovic a Australia. Tras el esperpento de 2022 (culpa de todas las partes), 12 meses después solo se habla de tenis. Algo que debemos celebrar. Lestienne, Halys, Shapovalov y Medvedev hincaron rodilla sin ganar un set. Korda, en la final, dispuso de una pelota de partido tras salvar un punto de set en la primera manga. No aprovechó su oportunidad y Djokovic no dejó escapar el objetivo. Octavo título de categoría 250 de los 92 que ya atesora.
Es la 16ª vez que Djokovic gana un partido tras salvar una pelota de encuentro en contra y la tercera vez que lo hace en una final. 48 puntos sin red que el serbio ha sido capaz de levantar para acabar ganando el partido (e incluso el título).
Ya lo era por como acabó 2022 y por su siempre extraordinaria relación con Australia. Pero tras ver su comienzo en la prueba previa de Adelaide, queda claro que Novak es el gran favorito a ganar el Abierto de Australia. El serbio no pierde en el país oceánico desde 2018, en octavos de final, cuando le sorprendió el surcoreano Hyeon Chung. Son 24 victorias consecutivas y 14 sets cedidos.
